24 de febrero de 2015

Replantear-te

No sé
en que punto de tu vida
te replanteas toda tu rutina.

Tus sentimientos
tus relaciones
y tu futuro.

No sé en que punto
nos empecé a replantear,
a dudar en nosotros,
en conjugarnos en
pretérito perfecto simple.

Empecé queriéndote
como cuando de niño te obligan a hacer algo que no quieres.
Parecía forzado hasta que al final
lo hice por inercia.
Y ahora que he llegado a este punto,
no sé si quiero seguir haciéndolo
o la inercia me obliga a ello.
Y es que no todo son primaveras,
no todo son re-encuentros en el andén,
tratando de recorrer el abismo que es tu boca
buscándome 
y encontrándonos.
Algún día entenderemos el amor como algo que nos haga felices
y no algo de lo que debamos depender.
Como algo que nos llene
pero no algo que nos haga dejar de ser lo que somos.

Algún día, prometo ir a tu encuentro,
pero no me pidas que lleve las primaveras para ti 
porque ya se habrán marchitado. 

No hay comentarios:

Publicar un comentario